LECTURA POLÍTICA
Oposición: derrota por adelantado
Noé Mondragón Norato
“La venganza es un plato que se come frío”. El senador priista Manuel Añorve no se aguantó y soltó la contundente frase el 1 de junio pasado, un día antes de la elección federal. Lo hizo movido por la algarabía, pues el Trife anunció ese día que “bajaba” en definitiva a Mario Moreno de la competencia al senado por el MC. Las huestes tricolores afines al ya senador reelecto festinaron. Pero el gusto les duró muy poco. Porque tras la elección los números hablaron. Y de acuerdo con los resultados del PREP, el PRI pasó en soledad en la pugna por el senado, a figurar como la tercera fuerza política en Guerrero. Y queda en consecuencia, menguado para la competencia por el gobierno estatal en 2027. Es cuestión de repasar las estadísticas y las coyunturas que se abren a raíz de lo anterior.
PRI: VOTO RAQUÍTICO. – La alianza partidista “Fuerza y Corazón por México” (PRI-PRD-PAN) fue todo un fracaso en Guerrero. De hecho, la candidata presidencial Xóchilt Gálvez alcanzó menos votos (290 mil 505) que los obtenidos por el priista Manuel Añorve (294 mil 917) de acuerdo con los resultados definitivos de la pasada elección. Y yendo solo a la disputa por el senado, el PRI se ubicó por abajo del MC al sumar 149 mil 869 votos, contra 169 mil 119 del partido naranja. Y si Añorve ganó la reelección fue por los votos justamente, del PRD (73 mil 981) y del PAN (44 mil 218). De ahí se abre lo demás: 1.- A pesar de que el MC era un partido meramente simbólico cumplió con la misión encomendada: le quitó miles de votos al PRI, quien bajo sus propias siglas gobernará en solamente dos municipios. Pero si se mira bien, ni siquiera uniendo los votos del MC con los de la alianza Corazón por México, igualan a los obtenidos por el Morena en la formula senatorial que fue de 623 mil 148. Lo cual implica una verdad de Perogrullo: la oposición está literalmente borrada de la competencia por el gobierno estatal en la elección de 2027. Ni Mario Moreno como eventual candidato a gobernador en 2027 −quien en la elección de gobernador de 2021 obtuvo 580 mil 971 votos y esta vez en la de senador se le restaron más de 400 mil votos− ni Manuel Añorve tienen de su lado los votos. Inútil evaluar que alguno de los dos tenga posibilidades de disputar con éxito el gobierno estatal. 2.- Como la alianza Fuerza y Corazón por México (PAN-PRI-PRD) se midió en términos de fracaso rotundo, la posibilidad de que estos tres partidos vuelvan juntos a competir en otra elección les augura de antemano, muy malos resultados. Porque las cabezas en las dirigencias nacionales seguirán siendo las mismas tanto en el PAN como en el PRI. Y Jesús Zambrano del PRD está luchando no sólo para mantener el registro nacional de su partido, sino empeñado en pasar al senado por la vía plurinominal de ocurrir lo primero. Trasciende incluso, que el dirigente nacional del PRI Alejandro Moreno Cárdenas Alito, apela a dos cosas: mantenerse como dirigente nacional reformando los estatutos internos otra vez. O en el otro escenario, empujar a uno de sus incondicionales: el diputado federal plurinominal por Campeche Pablo Guillermo Angulo Briceño. Es decir, los tricolores y también panistas y perredistas, le seguirán apostando a su literal suicidio político y electoral. La obligada refundación partidista no la desean ni les hace mella. 3.- En términos de operación política y para el caso Guerrero, los partidos PRI y PRD realizaron campaña proselitista por su cuenta y salvaguardando sus propios intereses. De esta forma, el senador Manuel Añorve declinó asistir a los eventos del candidato a la alcaldía por Acapulco, Carlos Granda. Y en cambio sí asistió al cierre de Alejandro Arcos Catalán en Chilpancingo. Acudió a levantarle la mano cuando los primeros conteos del PREP lo ubicaron a la delantera de la elección. Alejandro es cuadro político del exgobernador Ángel Aguirre y Manuel Añorve se quiere plegar por ese lado al grupo aguirrista con la mira puesta en la elección de gobernador. Pero la tela política no le alcanza. El propio exgobernador priista-perredista apareció menguado políticamente al perder el municipio de Ometepec, su feudo político y terruño. En contraparte, la ganadora de la elección fue sin duda, la gobernadora Evelyn Salgado al entregar resultados óptimos de la pasada elección a la presidenta electa Claudia Sheinbaum: un millón 105 mil 909 votos. Es decir, el 71.2 por ciento del total de los sufragios. Con ese caudal de aceptación al partido presidencial, la oposición en Guerrero “está moralmente derrotada” para la próxima elección de gobernador. Al parecer, no hay forma de revertir ese reloj.
HOJEADAS DE PÁGINAS…Trasciende que Rosaura Ruiz Gutiérrez, sería la próxima secretaria de Educación Pública en el gabinete de Claudia Sheinbaum. Apenas el pasado 2 de mayo, el rector de la UAGro, Javier Saldaña, acomedido y solícito, le entregó el doctorado Honoris Causa a dicha académica de la UNAM e integrante del equipo de campaña de la presidenta electa. Justo el 2 de mayo, pero de 2023, Rosaura ubicó a Guerrero como la entidad que aparecía en el lugar 31 en ingreso al Sistema Nacional de Investigadores (SIN) y el 23 en el Programa Nacional de Posgrados de Calidad. Es claro que Saldaña quiso atemperar las tormentas políticas federales que se avecinan. Por eso, apenas la semana pasada junto con los directores de escuelas y facultades a quienes tomó protesta, emitió un desplegado felicitando a Claudia Sheinbaum. Pero las cifras señaladas por Rosaura Ruiz no se han movido. Porque la UAGro está convertida en patrimonio de unas cuantas familias que apoyan al actual rector. La calidad y empuje académicos son mera simulación.
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