LECTURA POLÍTICA
El futuro de Jacinto
Noé Mondragón Norato
La realidad termina imponiéndose a la palabrería. Y por eso mismo, la prolongación del periodo de Jacinto González Varona como dirigente del Morena en Guerrero, le mete ruido a la sucesión gubernamental del 2027. Porque los tres primeros años del gobierno de Claudia Sheinbaum marcarán esa agenda. Y por eso mismo el presidente AMLO envió sus propios mensajes. Uno en particular es elocuente: la renuncia a su militancia en el Morena en el epílogo de su sexenio, pero la llegada de su hijo Andrés Manuel López Beltrán como secretario de Organización de ese partido. De ahí se lee lo demás.
PELÍCULAS TRICOLORES RECICLADAS. – Los círculos de poder en el Morena se cierran progresivamente. Y quedan como beneficiarios un apretado grupo de personajes. Exactamente como se hacía en el PRI. Basta con rastrear las pistas. 1.- Mario Delgado Carrillo terminó mal su periodo como dirigente nacional del Morena. Se le acusó de vender varias candidaturas en la pasada elección presidencial. Y la prueba más contundente es que presumiblemente y con base en lo anterior, Claudia Sheinbaum lo arrumbó como secretario de Educación en el gabinete presidencial que encabezará. Dicha dependencia no tiene rejuego político. Y lo saca de su perfil profesional de economista a pesar de lo complicado que proyecta en su manejo dicha dependencia. La evidencia más contundente al respecto es que son dos las mujeres que han desempeñado esa cartera durante el sexenio de AMLO: la actual gobernadora mexiquense Delfina Gómez Álvarez. Y Leticia Ramírez Amaya. Ninguna de las dos trascendió en ese encargo. Por eso se entiende que dicha dependencia es una especie de “congeladora política” para Mario Delgado. 2.- Si bien es cierto que Luisa María Alcalde Luján, es la virtual dirigente nacional del Morena, el presidente AMLO le
metió como cuña política a su propio hijo Andy López Beltrán. Se entiende que, a pesar de haber renunciado al Morena en la víspera de entregar la banda presidencial a Claudia Sheinbaum, AMLO seguirá operando desde las sombras, el palomeo de muchas de las candidaturas en el Morena. Ese partido se convirtió en su reducto principal de sobrevivencia política y de poder. Pero en esa maniobra cuidó las formas. Porque a ninguno de sus hijos los designó como presidente, en cargo público alguno. Lo hizo justo cuando ya se va. Por aquello de evitar los señalamientos de nepotismo. Y por eso mismo, en el Séptimo Congreso Nacional Extraordinario de ese partido se acordó también, dar continuidad a lo que ya estaba. De ahí se entiende la prolongación de Jacinto González Varona como dirigente estatal morenista en Guerrero. 3.- Como dirigente Jacinto siempre apareció muy limitado en su capacidad de movilidad y operación política. De hecho, se convirtió en todo un personaje propio de las películas del narcotráfico, al aparecer siempre acompañado por toda una parafernalia de seguridad encarnada en miembros de la Guardia Nacional que lo siguen custodiando a todos lados. Y si se mira bien, en regiones donde operan los grupos delictivos nunca se le observó realizando campaña a favor de los candidatos del Morena. Por eso, el futuro político que se abre para él estará determinado por varias circunstancias. Primero, que la prolongación de su mandato como dirigente le impida convertirse en aspirante a gobernador en la elección de 2027; segundo, que el eventual desempeño de Claudia Sheinbaum como presidenta se mida con más aciertos que errores y eso provoque desencanto en el Morena sin que Jacinto encuentre la estrategia para mantener cautivos el caudal de votos guindas obtenidos en la pasada elección federal; y tercero, que apele en una eventual repesca política y en un hipotético escenario de desastre, a repetir como diputado local plurinominal. O asegurar la curul federal por esa misma vía. En realidad, el suelo blando en el que hasta ahora ha caído Jacinto González, podría convertirse eventualmente, en duro. Es justo ahí donde se verá obligado a cuando menos dos cosas: operar su valía real como el dirigente estatal que siempre se colgó de la marca Morena para venderse exitosamente. O labrar su fracaso y desprestigio político como tal en escenarios de eventuales crisis políticas que no sabrá enfrentar. Esos son justamente, los riesgos de las prolongaciones de los mismos personajes en cargos partidistas estratégicos. Y si no, al tiempo.
HOJEADAS DE PÁGINAS…Como el polémico empresario Pedro Segura es su adversario político y este fue padrino de generación, el rector de la UAGro, Javier Saldaña Almazán “tiró línea” para que la mayoría de los maestros de la Facultad de Ciencias de la Comunicación y Mercadotecnia (Facom) −incluido el director Miguel Ángel Carrada Vega−, no asistieran a la ceremonia de graduación de la generación 2020-2024, celebrada el pasado sábado. ¿Es así como el rector planea revertir la caída de la matrícula en varias escuelas y facultades −en las que aparece la propia Facom− en donde tiene verdaderos santuarios de incondicionales? ¿Qué imagen se llevaron los padres de los alumnos egresados tanto del rector como del director de la Facom? ¿Acaso no era un evento institucional más que político? ¿Dónde se extraviaron la mesura, el buen juicio y la tolerancia? Al parecer, estos nunca han existido con Javier Saldaña dirigiendo la UAGro.
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