The Muffin
De Mike Tyson y Jake Paul a la Kings League Italia: la dudosa calidad del nuevo deporte… y sin embargo se mueve
Storybakers:
El éxito de Netflix no fue visto como un éxito para el deporte.
Fue un éxito para Netflix por alcanzar 60 millones de hogares con una pelea entre Mike Tyson y Jake Paul.
Un boxeador retirado de 58 años contra un youtuber de 27 años convertido en boxeador profesional.
Fue un éxito para Netflix por haber generado una conversación mundial con un cruce de generaciones.
Los boomers nostálgicos deseosos de ver el regreso de Mike Tyson.
Los centennials adictos a Jake Paul y curiosos como cualquier joven de ver las diferencias entre lo nuevo y lo viejo, sobre todo si este último es nivel legendario.
La calidad de la pelea fue decepcionante.
Mike Tyson no mostró condiciones más que en el primer round.
El resto fue un paseo para Jake Paul.
Pero es que en realidad no podía esperarse mucho más.
El propio Mike Tyson recordó que apenas en junio estuvo cerca de morir.
Que tuvo que recibir ocho transfusiones de sangre.
Que perdió la mitad de su sangre y 25 libras de peso en el hospital.
“This is one of those situations when you lost but still won. I’m grateful for last night. No regrets to get in ring one last time. I almost died in June. Had 8 blood transfusions. Lost half my blood and 25lbs in hospital and had to fight to get healthy to fight so I won.”
Se estima que por la pelea, Mike Tyson se llevó 20 millones de dólares.
Jake Paul, según contó en la conferencia de prensa previa, 40 millones de dólares.
Casi sin querer, el deporte-entretenimiento le hizo un favor al deporte de alto rendimiento.
Con la atención puesta en la pelea entre Mike Tyson y Jake Paul, Netflix también habría conseguido hacer historia en el deporte femenil.
De acuerdo a sus propias cifras, la pelea previa entre Katie Taylor y Amanda Serrano fue vista por más de 50 millones de hogares a nivel global.
Dicha cifra representa la pelea femenil más vista en la historia del deporte en Estados Unidos.
Aún no se termina de procesar el efecto de la pelea entre Mike Tyson y Jake Paul para Netflix cuando ya ha anunciado que Beyoncé será la responsable del show de medio tiempo en el Ravens contra Texans durante el Christmas Day de la NFL.
En la NFL los creadores también están presentes.
Como el mexicano Robegrill estrenando Watch With de YouTube durante el partido entre los Gigantes de Nueva York y las Panteras de Carolina.
Como Dude Perfect transmitiendo el Thursday Night Football a través de Prime Video.
Como los hermanos Manning convirtiéndose en grandes protagonistas a través del Manningcast.
Y como los múltiples streams diseñados para atraer a nuevas generaciones en el mundo de Toy Story y en el de Bob Esponja, a los que se sumará la transmisión desde el mundo de Los Simpson.
Hace apenas unas horas, en el Reino Unido, el colectivo de creadores The Sidemen hizo sold out en tres horas a las noventa mil entradas puestas a la venta para su partido de la caridad en Wembley.
Una tradición que comenzó en 2015 que no para de escalar.
Una tradición que en su versión 2023 recaudó 2.9 millones de dólares.
Una tradición que buscará superar los 2.5 millones de viewers concurrentes que alcanzaron en su edición previa.
Para seguir con la geopolítica del nuevo deporte protagonizado por los creadores, la Kings League realizó la presentación oficial de la Kings League Italia.
Su presidente será Zlatan Ibrahimovic.
Su director de competencia, Claudio Marchisio.
Estuvieron presentes en el evento Gianluigi Buffon, Francesco Totti y Andrea Pirlo.
La competencia estará integrada, como en sus otras dos ediciones, por doce equipos.
Se dio a conocer también que Italia será el país sede de la Kings World Cup Nations.
La competencia que por primera vez enfrentará a distintas selecciones nacionales en la modalidad creada por Gerard Piqué.
Para garantizarse el ruido mediático con su llegada a Italia, la Kings League puso a la venta los boletos para el evento final de la Kings World Cup Nations que se disputará en el estadio de la Juventus con capacidad para 41 mil 507 espectadores.
El anuncio de la Kings League Italia se produce en medio de una constante perdida de audiencia en sus distintas modalidades.
Para la Kings League lejos están esos meses iniciales en que superaron el millón de espectadores concurrentes con el evento final en el Camp Nou de Barcelona ante 92 mil 500 espectadores.
Desde ese entonces han sido constantes los cuestionamientos de los propios creadores respecto a un modelo de negocio que deja que recaiga en ellos la consecución de patrocinios para sus respectivos equipos.
Pero el plan de Piqué, pese al dudoso modelo de negocio para los principales protagonistas que son los creadores y ante una caída innegable de audiencia, pasa por seguir abriendo ligas alrededor del mundo.
En mayo de este año, Kosmos anunció un levantamiento de 65 millones de dólares para garantizar su expansión global.
A la nueva liga en Italia pronto su sumará la Kings League Brasil.
Con la realización de la Kings World Cup Nations, la Kings League visibiliza oportunidades en distintos mercados.
Cada Selección participante es potencialmente una liga por ser creada.
Hasta ahora van ocho representaciones anunciadas.
De ellas, sólo tres cuentan con una liga propia, aunque Argentina y Colombia forman parte de la Kings League Americas que se juega desde México.
Donde antes había expectativa cada vez abunda más el desinterés.
A la Kings League no le ha sido fácil garantizar el lleno para sus máximos eventos a últimas fechas.
Se acercó al lleno en el estadio Azteca regalando miles de entradas.
Lo mismo ocurrió para provocar el lleno en el estadio BBVA de Monterrey.
Para el Final Four del actual split de la Kings League Americas, la liga ofreció un descuento del 30% en estos días de Buen Fin, el equivalente mexicano al Black Friday de Estados Unidos.
En los comentarios de las cuentas oficiales de la Kings League Italia se preguntan si de verdad Zlatan, Luca Toni, Claudio Marchisio, Totti y Buffon estarán presentes en el día a día.
A la Kings League se le ha cuestionado por utilizar grandes nombres como meros imanes de conversación que al final no se comprometen ni participan activamente.
Ocurrió con el propio Zlatan cuando pese a ser designado como presidente de la Kings World Cup de clubes, su rol se limitó a unos cuantos videos pregrabados.
Con Rio Ferdinand ocurrió lo mismo.
El equipo que presidía ni siquiera se presentó a un partido dentro del mismo mundial.
Entre los anuncios más recientes de la Kings League, destaca la presencia de Lamine Yamal.
Él mismo se encargó de anticipar que será presidente de un equipo.
Que en su equipo él pondrá las reglas.
Pero son muchos los que se preguntan si de verdad podrá jugar un rol protagónico cuando es un futbolista activo en uno de los equipos más grandes del mundo.
Mientras ese anuncio se materializa, Lamine Yamal, la Kings League y Adidas lanzaron una edición limitada de doscientos pares de las F50 de la Kings League.
La Kings League, como el nuevo deporte en lo general, oscila entre lo épico y la estafa.
Se alimenta de un ruido mediático que muchas veces no corresponde a la realidad.
Aún con sus cifras a la baja, nadie puede negar que en el fondo ha resignificado modalidades que habían sido ignoradas y menospreciadas tanto por los aficionados como por la propia FIFA.
Si comparamos al futbol de siempre con la Kings League, la competencia de Piqué está aún a años luz.
Pero si comparamos el futbol de la Kings League con el futbol 7 o con el futbol de playa, la Kings League es un producto mucho más atractivo.
Atrae a las nuevas generaciones.
Entiende que en este tipo de competencias el entretenimiento ha de pesar más que el deporte.
La pelea entre Mike Tyson y Jake Paul fue un éxito indiscutible para Netflix.
No importa mayormente si a nivel deportivo aquello fue una gran idea o una estafa de grandes proporciones.
La consolidación del ecosistema Kings League es un éxito indiscutible para Kosmos y para Piqué.
Aunque en el fondo haya enormes dudas sobre el modelo de negocio para los creadores.
Aunque tengan como playbook el relacionamiento con grandes marcas que después resultan no estar tan vinculadas.
Es un éxito para The Sidemen hacer sold out en Wembley.
Aunque después la calidad futbolística deje mucho que desear.
Netflix ha ido construyendo la intersección entre el nuevo y el viejo deporte.
Pasará en cuestión de semanas de lo absurdo de enfrentar a Mike Tyson contra Jake Paul a transmitir los dos juegos navideños de la NFL.
La Kings League ha hecho lo propio.
Se ha valido de los creadores como puerta de entrada.
Pero a partir de ello, ha ido replicando el ecosistema necesario para constituirse como un deporte que llegó para quedarse.
Si lo conseguirá está por verse.
Entre más ligas y competencias, más sólido su ecosistema.
Pero entre más saturación, más probable que eso que una vez fue novedad se convierta en una actividad tan de nicho que tarde o temprano quede en el olvido.
Así es el nuevo deporte.
Siempre entre la épica y el absurdo.
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