LECTURA POLÍTICA
Las riquezas y amenazas de Jacinto
Noé Mondragón Norato
En realidad, no se entiende cuál es el origen y de dónde proviene su riqueza personal. Confunde a muchos incautos diciéndoles que ha formado parte de una familia “acaudalada”. Y de acuerdo con trascendidos políticos ha comprado propiedades y ranchos en las dos Costas. Migró de modesto fundador de Morena a hombre “de negocios” de la política guerrerense. Tampoco se entienden las razones por las que es resguardado por ostentosa parafernalia integrada por elementos de la Guardia Nacional. Y en los últimos meses cambió el discurso de condena al pasado priista, por otros más rentables para sus fines de poder: darles la bienvenida a muchos de esos militantes tricolores caídos en desgracia. Y meterse con fuerza a la disputa por la candidatura al gobierno estatal. Las pistas lo confirman.
JACINTO Y SUS LODOS. – Para el dirigente estatal del Morena, Jacinto González Varona, su momento político es hoy. Por eso se aferra “perrunamente” a la idea de convertirse en candidato a gobernador, pero sin haber asistido nunca a una elección abierta. Y, además, acumulando cada vez más lastres. Se lee así: 1.- Una fuente de alto nivel del partido Morena reveló a Lectura Política, que Jacinto tiene negocios lucrativos con el titular de la auditoria superior del estado (ASE), el astudillista César Paris Peralta Hidalgo. De esta forma Jacinto serviría de intermediario entre la ASE y varios presidentes municipales a los que les facilitaría la justificación de sus cuentas públicas. Sobre todo, de esos ediles que no logran cuadrarlas, por aquello de los millonarios desvíos. A cambio desde luego, de jugosas ganancias para todos. Se trata de aplicar el apotegma de ganar-ganar. Y el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso local, Jesús Urióstegui García, está obligado a intervenir decididamente en lo que se anticipa y prefigura como un auténtico lodazal. ¿Forma parte lo anterior de los ingresos de Jacinto que no se justifican como dirigente de un partido político estatal? Lo cierto es que con ello, daña sensiblemente la imagen pública del propio Morena.

2.- Jacinto González se ha negado sistemáticamente a explicar las razones por las que sigue conservando a un nutrido grupo de elementos de la Guardia Nacional resguardándolo, pese a que la nueva iniciativa ética del Morena del pasado 4 de mayo los prohíbe. Y es un privilegio que sólo la gobernadora posee. Pero ¿cuáles son en realidad las amenazas que penden sobre dicho dirigente estatal? ¿Por qué guarda tan celosamente dicho secreto? Las huellas conducen, sin embargo, hacia una sola: la venta de muchas candidaturas a cargos de elección popular en ese partido político. Durante la pasada contienda electoral de junio de 2024 tanto a Jacinto González como al ex dirigente nacional del Morena y actual secretario de Educación Mario Carrillo Delgado −en la mira ya del gobierno de los Estados Unidos, para quitarle la Visa por presumibles sospechas de vínculos criminales−, se les acusó justamente, de vender candidaturas. Como la marca partidista vende muy bien, se convirtió en preciada joya y en postulaciones seguras para arribar a dichos cargos. Ello explica toda la caterva de improvisados en las alcaldías y en el Congreso local. Desde luego, se debieron generar millonarios anticipos que derivan, en muchos casos, en desacuerdos. Y por supuesto, en amenazas cuando no se cumplen, en función de que los aspirantes no invierten en chicles y caramelos. Jacinto no admitirá jamás, que vendió candidaturas. Aunque sea un secreto a voces. 3.- Es verdad que el dirigente estatal del Morena forma parte de los morenistas “originales”. Es decir, de los que fundaron en Guerrero ese partido. Y el pleito de Jacinto es justamente, con aquellos perredistas que llegaron a colonizarlo. Entre ellos, la senadora Beatriz Mojica Morga, a quien observa con cierto recelo no sólo porque acaparó la candidatura al senado, sino porque está saltando a la contienda por la candidatura a gobernador para la elección de 2027. Y evalúa tener más derechos políticos ganados. Por eso se ha desbordado pintando paredes con su nombre. Violando flagrantemente el estatuto morenista que dicta no iniciar precampañas por adelantado. Y en ese carril, ¿de dónde obtiene Jacinto González el recurso financiero, si se entiende que como dirigente estatal su salario es modesto, en apariencia? Pese a ello, Jacinto se quiere meter a la contienda para gobernador. Está seguro de que la merece. Qué tal.
HOJEADAS DE PÁGINAS…El que se fue a poner de “tapete” con la subsecretaria de seguridad del gobierno federal, Estela Damián Peralta, fue el experredista, ex petista, ex emecista y ahora personaje sin partido y caído en desgracia política, Sebastián de la Rosa Peláez. Asume que Estela es su única apuesta dentro de Morena para la elección de gobernador de 2027. Pero Sebastián de la Rosa olvida convenencieramente, su pasado tortuoso en los fatídicos hechos de Iguala de septiembre de 2014, que derivaron en la desaparición de los 43 normalistas. Porque junto con Lázaro Mazón Alonso fueron quienes empujaron y recomendaron al interior de las tribus del PRD en 2012, la candidatura del defenestrado exedil perredista y actual presidiario del penal del Altiplano, José Luis Abarca Velázquez. Y si Estela aceptó esa adhesión −la de Sebastián− significa que está agarrando todo lo que puede a falta de apoyos políticos importantes en el plano local. Aunque al final esos mismos “apoyos” la estén deflagrando muy temprano.
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