Imagina que conoces al hombre más tatuado del mundo.
Roberto Santos
05/10/2025
Chilpancingo, Gro.
Un cuerpo entero cubierto de tinta: calaveras, bandas de rock, símbolos de rebeldía. Desde los trece años, Leandro de Souza decidió que su piel sería su manifiesto.
Cada tatuaje era una declaración, un escudo, una voz que gritaba lo que su alma no podía decir. Y por un tiempo, funcionó.
Ser el más tatuado de Brasil no era solo un récord: era su identidad, su orgullo, su refugio.
El cuerpo, como diría la psicología, no era solo biología: era territorio de historia, de deseos, de heridas. Y en Leandro, cada centímetro de piel hablaba de una lucha interna por sostenerse, por no fragmentarse.
Pero entonces, todo cambió.
Imagina que un día, en medio del ruido de su vida —la fama, la soledad, la adicción—, una mujer se le acerca. No lo mira como un espectáculo. No le pregunta cuántos tatuajes tiene ni cuánto dolor soportó. Solo le habla… de Dios. Y algo en él se mueve.
Lo que había sido una armadura empieza a pesarle. Aquello que antes lo protegía, ahora lo asfixia. “Ya no quería ser una atracción de circo. Quería volver a ser yo”, diría después.
No se trataba de borrar el pasado, sino de renacer.
Comienza un proceso lento, doloroso y simbólico: el borrado de los tatuajes. Sesión tras sesión, la piel se va aclarando, pero lo más importante ocurre por dentro.
Lo que antes necesitaba gritar desde el cuerpo, ahora comienza a decirlo con palabras. Lo que antes era espectáculo, ahora es testimonio.
Se podría decir que Leandro dejó de sostener una imagen idealizada y alienante para habitar un deseo más auténtico, más íntimo.
El yo no se recupera como algo perdido, sino que se reconstituye desde otro lugar. Ya no necesita tatuarse para existir. Ahora, su historia habla por él.
Y así, el hombre que una vez usó su cuerpo como grito, encuentra en el silencio y la fe un nuevo modo de narrarse.
Su renacimiento no niega quién fue, pero lo transforma. Donde antes hubo piel marcada, ahora hay memoria elaborada. Donde hubo imagen, ahora hay palabra.
Para Leandro, borrarse, es otra forma de escribirse de nuevo.
Denuncia en desdeabajo Noticias!
¿Conoces o tienes fotos y videos de algún acto de posible negligencia, corrupción y abuso de autoridad? Mándalo al WhatsApp: de desdeabajoNoticias: 7443262471. ¡Compártelo! Nosotros le damos seguimiento.
Síguenos también en Twitter: @Yae31099C en Facebook: DesdeabajoAca:https://www.facebook.com/profile.php?id=1000636239783