Tumbando Caña
El Fair Play deportivo debe aplicarse en lo político
Juan Antelmo García Castro
Es harto emotivo ver a un niño, niña o joven llegar hasta la media cancha de fútbol y exhortar a los jugadores de ambos equipos a cumplir con el Fair play, que en español significa juego limpio, concepto utilizado a nivel nacional e internacional, mediante el cual se exhorta a jugadores, árbitros, entrenadores y al respetable público a comportarse decentemente durante todo el partido, un hecho de buena voluntad que también debería ponerse en práctica en los procesos electorales; es decir, no ofender, ni tratar de descalificar al adversario con vituperios, además de reconocer dignamente la derrota y festejar la victoria con humildad, según sea el resultado, pero, al menos en nuestro México lindo y querido, estos deseos son sueños guajiros y como botón de muestra tenemos la actitud insensata adoptada hoy en día por dos personajes señalados de perversos tanto dentro como fuera del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en contra del aspirante a Senador de la República por Movimiento Ciudadano (MC),
Mario Moreno Arcos, refiriéndome obviamente a Manuel Añorve Baños y a su protector Alejandro Moreno Cárdenas, candidato a Senador y líder nacional del PRI, respectivamente, que, en el caso de Guerrero, no están dispuestos a jugar limpio, al menos con Moreno Arcos, a quien desde el inicio del proceso electoral 2024 le están jugando muy sucio, evidentemente en defensa de sus proyectos personales y no del mejor interés del pueblo suriano que, afortunada e históricamente, se manifiesta con plena libertad democrática…Es del dominio público que en una sesión maratónica del Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE), que inició el pasado miércoles 1 de mayo a las nueve de la noche y concluyó alrededor de las dos de la madrugada del jueves, sorpresivamente tomó la decisión de retirar la candidatura a Mario Moreno Arcos, “porque no pudo comprobar que forma parte de los pueblos afro-mexicanos”, cuando en realidad todo mundo sabe que fue por los patéticos ataques del Revolucionario Institucional contra el aspirante naranja, específicamente de Manuel Añorve y Alejandro “alito” Moreno, a través de uno de sus porros institucionales: Hiram Mier Zetina, quien en las redes sociales se presenta con la rúbrica “Jesús en ti confío” y era representante del PRI ante el INE, porque su patrón Alejandro Moreno Cárdenas lo sustituyó de manera fulminante, luego de que se retiró la candidatura a Mario Moreno, o bien Hiram Mier pidió su baja de manera voluntaria agobiado por su conciencia intranquila al lanzar toda clase de improperios –en ausencia- a Mario Moreno…Por cierto, Hiram Hernández Zetina nació en Xalapa, Veracruz y en las elecciones de 2018 fue candidato del PRI a diputado federal por el Distrito 04 de Chihuahua, quedando en tercer lugar de la votación con el 14.62% de los votos…Como premio de consolación, en ese mismo año lo nombran presidente nacional del Consejo Tecnológico Universitario de la Red Jóvenes X México; en 2019 es designado dirigente nacional de esa organización juvenil, arropado por el tristemente célebre líder nacional del PRI, Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas, de quien recibe órdenes lacayunamente, agradecido porque en el 2021 fue elegido diputado federal por la vía plurinominal a la LXV Legislatura, cuyo periodo constitucional concluye este año…Por último, hoy jueves se espera que el INE emita voto a favor del registro de Mario Moreno Arcos como candidato a Senador por Movimiento Ciudadano, confiando en que el dúo intrigante Añorve-Alito no vuelvan a impugnar, que jueguen limpio y ganen en las urnas, no en el escritorio con la complicidad del INE.
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